¿Qué tengo que pagar por vender un coche?

Vender un coche suele conllevar una serie de trámites, entre lo que se encuentra declararlo a Hacienda en la renta y pagar los impuestos correspondientes. A continuación te vamos a explicar que procesos tienes que llevar a cabo cuando se da ese y caso.

¿Tenemos la obligación de declarar la venta de un coche a hacienda?

En principio a la hora de vender nuestro coche en el IRPF tenemos que declarar las ganancias o pérdidas cuando transmitimos un bien de nuestro patrimonio. Sin embargo, existen alguna que otra excepción como no tener la obligación de desgravar por las pérdidas debidas al consumo.

Este caso lo asociamos a la venta de coches y vehículos particulares, ya que lo normal es venderlos por un precio inferior al que lo compramos. Aunque se haya producido una pérdida patrimonial, no hay que incluirlo en tu declaración de la renta ya que la pérdida se debe al consumo.

¿Quién paga la transferencia de un coche?

No hay ninguna ley que establezca quién debe pagar la transferencia a la hora de vender nuestro coche. En la mayoría de los casos los gastos suelen correr por cuenta del comprador, sobre todo si se trata de una venta entre particulares. Estos gastos también incluye las tasas de venta en la DGT y la gestoría.

De todos modos lo ideal siempre es llegar a un acuerdo para que una de las partes se haga cargo del pago o repartirse el coste. Tenemos que tener en cuenta que este punto debe quedar claro antes de cerrar la venta, para que ninguna de las dos partes tenga que hacer frente a costes imprevistos.

Pago de impuestos en transferencias de vehículos

La transferencia de vehículos lleva asociada el pago del impuesto de transmisiones patrimoniales que únicamente se paga si el vendedor es un particular. Este pago por ejemplo es solo responsabilidad del comprador. Este impuesto varía en función de la comunidad autónoma que nos encontremos.

En el caso de que el vendedor sea una empresa, la operación de venta estará sujeta a IVA y también corre a cargo del comprador.

Otra duda que vamos a proceder a aclarar es el pago del IVTM (impuesto sobre vehículos de tracción mecánica), se trata de un impuesto que los vehículos que actualmente circulan por nuestras carreteras deben pagar. Este impuesto lo debe abonar quien haya sido el titular del coche el uno de enero de ese año, es decir, si tú procedes a vender tu coche el 19 de enero, tú serías el responsable del pago.

¿Hay que pagar el Impuesto de vehículos para poder vender o comprar?

Desde el 1 de enero de 2011 no está permitido cambiar de titular un vehículo si en el Registro de vehículos de la DGT aparece como impagado el Impuesto de vehículos del año inmediatamente anterior al año en curso en el ayuntamiento donde esté domiciliado el vehículo.

En todo caso habrá que saber si a la DGT le consta el impago del Impuesto municipal, ya que los Ayuntamientos deben comunicar los impagos a Tráfico, y en algunos casos, dependiendo del ayuntamiento, esto se demora, o no se comunica, por lo que es posible que tenga algún recibo impagado, pero que aún no consta en el registro de vehículos de Tráfico.

¿Qué pasa si vendo un vehículo con el impuesto de circulación sin pagar?

Tenemos que tener claro que en el momento de una transacción compra-venta, tanto el vendedor como el comprador tienen que tener en cuenta que es imposible vender un coche sin el impuesto de circulación. Las dos partes tendrán que comprobar que todos los pagos están al corriente.

En España es totalmente ilegal y está absolutamente prohibido cambiar de titularidad a un vehículo si aparece como no pagado en el registro de la Dirección General de Tráfico.

Sin embargo, hay ciertos casos en los que el pago se haya perdido, lo que puede llevar a traer problemas tanto para el comprador como para el vendedor del coche. Estas ocasiones ocurren de manera poco frecuente.

¿Cuál es el coste del impuesto de circulación?

Esta pregunta resulta difícil de responder ya que su coste se establece por ley en función de la potencia, el tipo de vehículo y la contaminación que emite y todo esto dependerá de cada Ayuntamiento la tarifa definitiva que se establezca.

El no pagar este  impuesto supone una deuda municipal, la cual se irá acumulando y puede llegar a convertirse en multa de tráfico si no se procede a pagarla.

¿Quién está exento de pagarlo?

Hay vehículos que por su finalidad quedan exentos de este pago como es el caso de los vehículos que se dedican al transporte público de viajeros, los de uso agrícola, ambulancias, vehículos con matrículas diplomáticas, vehículos históricos o de coleccionista y todos aquellos que estén adaptados a personas con movilidad reducida.

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